La mayor parte de las enfermedades contraídas durante los viajes tienen carácter infeccioso. Son debidas a gérmenes, bacterias, virus o parásitos. El viajero puede contaminarse de muchas maneras. En aquellos países en los que la sanidad pública es deficiente el agua es el modo más habitual. También pueden adquirirse enfermedades por contacto con una microflora para la que el organismo carece de defensas: contacto con la población local, por alimentos, animales o relaciones sexuales.

La forma más efectiva de prevenir las enfermedades es la vacunación, cuando ello sea posible, pero en cualquier caso se pueden tomar medidas para prevenirse de cualquier riesgo.

Lavado de manos

El lavado de manos es una medida preventiva bastante eficaz contra las enfermedades infecciosas en nuestro ámbito, en los ajenos, resulta esencial mantener una buena higiene de las mismas para evitar la transmisión de enfermedades. Si no se pueden higienizar con agua y jabón, los geles con alcohol son una buena alternativa.

Alimentos y Agua

Las infecciones que transmiten al viajero originan generalmente diarreas. La gravedad de la enfermedad dependerá del agente que la haya causado. En cualquier caso, se pueden adoptar una serie de medidas para minimizar el riesgo de adquirirlas:

• Preste atención a las condiciones de la comida.
• Coma alimentos bien cocinados y aún calientes.
• Coma frutas y verduras cocinadas o que se puedan pelar.
• Evite comer productos de alto riesgo: ensaladas, lácteos no pasterizados, comida callejera, mahonesa o productos de la pesca procedentes de aguas dudosas.
• Beba agua embotellada abierta por usted mismo.
• Evite los cubitos de hielo.
• Cepíllese los dientes con agua embotellada o desinfectada.
• La cerveza, el vino y los refrescos suelen ser seguros
• Si es necesario, desinfecte el agua. El método más seguro es hervirla de uno a tres minutos dependiendo de la altitud.

Insectos

En los destinos tropicales hay que impedir las picaduras de los insectos porque se comportan como agentes inoculadores de microbios que causan enfermedades como ocurre en la fiebre amarilla, el dengue, la malaria y otras.

Conviene en estos viajes es útil usar ropa que deje poca piel al aire y que tenga colores poco llamativos para evitar atraer los insectos. También conviene utilizar repelentes.

Vacunación

Resulta necesario considerar la vacunación si se va a viajar a destinos exóticos. En función de los mismos, será conveniente inmunizarse contra uno u otro agente. Infórmese adecuadamente teniendo en cuenta que una vez vacunado, se necesita cierto tiempo para alcanzar una protección eficaz.

Esperamos que estos consejos os sean de ayuda y sobretodo, que paséis unas vacaciones geniales!